Qué ver en Estambul, la antigua ciudad de Constantinopla
Si vas de viaje a Estambul, hay unos cuantos lugares que no te puedes perder. Y es que en esta ciudad podemos encontrar el arte bizantino en todo su esplendor, ya que Constantinopla, ahora llamada Estambul, fue la capital del Imperio Bizantino, pero también fue tomada por el Imperio Otomano, por lo que nos encontramos cruces y mezclas de culturas en los edificios que son un reflejo de la historia de Estambul en particular y de Turquía en general. Es una ciudad donde nos esperan lugares mágicos y hermosos que los turistas no se pueden perder.
Conozcamos qué ver en Estambul, la antigua ciudad de Constantinopla:
Santa Sofía
Sin duda, la obra culmen del arte bizantino. Construida entre los años 532 y 537, sufrió modificaciones en 1453 cuando la ciudad fue tomada por el Imperio Otomano y la transformaron en una mezquita. Entre los cambios, figura la implementación de cuatro minaretes. Bien, si la fachada de este templo religioso ya impone por sus cúpulas, el interior es espectacular. Con sus medallones, mosaicos –los cuales son muy interesantes e importantes-, sus columnas y la presencia del dorado por todas partes bañados por una luz tenue e indefinida, es uno de lugares más impresionantes para ver de Estambul. Además, si se tiene la oportunidad de subir a los minaretes, no se pueden olvidar de asomarse y ver las preciosas vistas panorámicas que ofrecen.
Mezquita Azul
Construida a principios del siglo XVII, es la mezquita más relevante de Estambul y presenta una fachada y apariencia similar a Santa Sofía, en realidad mide la mitad de ésta.
Su construcción no estuvo exenta de polémicas, y es que cuando finalizó la construcción, ésta presentaba seis minaretes, los mismos que tenía la Meca, lo cual no gustó a los fieles. La situación se solucionó añadiendo un minarete más a la Meca, con lo que se calmaron los ánimos. Una vez que el visitante entra y tiene la oportunidad de ver el interior, comprende el porqué de su nombre, y es que los azulejos azules son los que predominan, sobre todo en la cúpula. La luz entra en la mezquita a través de hermosas vidrieras.
Palacio Topkapi
Si Santa Sofía es la obra culmen del arte bizantino, el Palacio Topkapi es la máxima expresión de poder de cuando Constantinopla era la sede del poder del Imperio Otomano. Este complejo palaciego, construido a mediados del siglo XV, está compuesto por varios edificios y patios circundados por murallas.
Entre las zonas más interesantes para ver nos encontramos con el Tesoro, con objetos y joyas de entre las más valiosas del mundo, destacando el puñal topkapi, por ser el arma más cara del mundo hecho en oro y adornado con esmeraldas, diamantes y piedras preciosas; y el diamante cucharero, que con sus 88 quilates es el tercer diamante más grande y fue propiedad de la madre de Napoleón.
Las Cocinas Reales, las cuales albergan la tercera colección más importante y valiosa de porcelana y cristal. Y el Harén, de una belleza y delicadeza exquisita, era la residencia oficial del Sultán y su familia, junto con cientos de mujeres entrenadas en diversas habilidades. En este complejo palaciego también podremos visitar el Museo Arqueológico de Estambul.