Las fuentes de agua más espectaculares del mundo

El agua es un elemento clave no sólo para la vida, sino para recrearnos en ella. El agua nos transmite calma, el agua embellece, realza, hidrata, oxigena… Es por ello por lo que la tenemos bien presente desde nuestro puesto de trabajo, a través de Agua Eden Fuentes de Agua, hasta en parques y jardines mediante surtidores, pero también como elemento puramente ornamental, como es el caso de las fuentes que decoran ciudades y monumentos a lo largo del mundo. Hoy os mostramos las más espectaculares y dónde se localizan.

 

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Hotel Bellagio (Las Vegas)

 

Podremos criticar a Las Vegas como la ciudad del artificio, pero jamás con que sus calles no son un auténtico espectáculo, como el que ofrecen sus grandes fuentes, de las que destacan las del Hotel Bellagio.

 

En la intersección de dos de sus más importantes vías (Las Vegas Strip con Flamingo Road) encontramos este magnificente hotel cuyos 4.500 puntos luminosos y 1.200 surtidores se armonizan al ritmo de músicas cambiantes sobre un gigantesco lago artificial. Todo un espectáculo sensorial y un despliegue de ingeniería disponible cada cuarto de hora.

 

 

La Font Màgica (Barcelona)

 

 No dudamos de la espectacularidad de los espectáculos de Las Vegas, ni las megalómanas réplicas que en Dubai se están realizando (como la que preside la entrada al Burj Khalifa con 6.500 focos, 50 proyectores y 22.000 litros de agua que se mueven a la vez), pero al igual que éstas segundas son deudoras de las primeras, toda fuente concebida como espectáculo de luz y sonido le deben su ingenio a la aún impresionante y cautivadora fuente que desde 1928 preside la entrada a la montaña de Montjuïc, donde no sólo el color y la música son protagonistas: también un entorno espectacular y un conjunto de fuentes en forma de cascadas, ríos y enormes chorros verticales que flanquean al conjunto principal.

 

La fuente Genève (Ginebra)

 

No hacen falta alegorías, monumentales esculturas ni gran cantidad de juegos de chorros que se coordinan entre ellos: en ocasiones se hace valedor aquello del “menos es más” y, en el caso de las fuentes, en Ginebra encontramos el mejor ejemplo de ello: un único surtidor sobre el lago Leman que produce un único chorro que alcanza los 150 metros de altura.

 

7000 litros de agua suspendidos en el aire que se hacen visibles desde cualquier punto de la ciudad y que se han convertido en todo un símbolo de la ciudad suiza, magnífica sencillez replicada en menor medida a lo largo de todo el mundo.

La fuente de los Leones (Granada)

 

De un chorro de siete toneladas y fuerza descomunal, a uno que apenas vierte una décima parte de litro en su pila central. En la impresionante Alhambra encontramos dentro de uno de sus patios la fuente de los Leones: un conjunto labrado en mármol blanco donde 12 leones sujetan a lomos el surtidor mientras vierten agua hacia cuatro canales que simbolizan los ríos del paraíso.

 

Todo un ejemplo de ingeniería medieval y belleza arquitectónica que data del S. XI y resume todo el trabajo hidráulico realizado para el imponente palacio nazarí.

 

La Fontana di Trevi (Roma)

 

Por monumentalidad, pero también como símbolo de tradición no podía faltar la fuente más mítica de Roma y del universo fílmico.

 

En la pequeña plaza que le da nombre, aparece de golpe la fuente barroca más grande de la ciudad, alegoría de Neptuno, la calma y la bravura de los mares. Elegantemente iluminada a la noche (cuando se recomienda visitarla), la cultura popular casi que obliga a lanzar una moneda de espaldas para que se conceda cualquier deseo y para que la visita a la ciudad eterna sea completa.

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